Las tormentas eléctricas representan un riesgo significativo para personas, estructuras y equipos. Contar con un sistema de protección adecuado no solo previene daños materiales, sino que asegura la continuidad de operaciones en instalaciones críticas. En entornos como zonas ATEX (atmósferas explosivas) o aeropuertos, donde los sistemas de comunicación y navegación son esenciales, la elección del sistema correcto puede ser vital.
La protección contra rayos no es una solución única para todos. Dependiendo de la estructura, las condiciones del entorno y el nivel de riesgo, se deben considerar diferentes sistemas, desde pararrayos convencionales hasta tecnologías avanzadas como los sistemas desionizantes. Pero ¿cómo garantizar que la instalación sea realmente efectiva? A continuación, exploramos algunas claves esenciales para tener en cuenta al instalar un sistema de protección contra rayos.
1. Evaluación del riesgo
El primer paso es realizar un análisis que determine la vulnerabilidad de la estructura y las consecuencias de un impacto. Este estudio debe seguir normativas internacionales como la IEC 62305 y adaptarse a regulaciones locales, especialmente en entornos industriales o sensibles.
2. Elección del sistema
La elección del pararrayos depende del tipo de estructura y su entorno. Por ejemplo:
- Sistemas tradicionales (Franklin): Dirigen el rayo hacia el suelo, pero pueden generar riesgos secundarios como sobretensiones.
- Sistemas desionizantes (CMCE): Evitan la formación de rayos, ofreciendo protección más avanzada y segura, ideal para entornos críticos como hospitales, aeropuertos o plantas industriales.
3. Ubicación y diseño
El pararrayos debe instalarse en el punto más alto de la estructura, garantizando que cubra toda el área mediante cálculos precisos. En instalaciones grandes, como torres de telecomunicaciones o refinerías, puede ser necesario combinar varios dispositivos.
4. Sistema de puesta a tierra
Un sistema de puesta a tierra eficiente disipa de forma segura la energía de los rayos. Este debe cumplir con los estándares normativos, especialmente en suelos con baja conductividad, para evitar acumulación de carga peligrosa.
5. Mantenimiento continuo
La protección contra rayos requiere inspecciones regulares para garantizar su efectividad. Esto incluye revisar la resistencia del sistema de puesta a tierra y realizar pruebas periódicas.
Conclusion
La instalación de un sistema de protección contra rayos no solo asegura bienes y personas, sino que es una inversión en la continuidad operativa de cualquier instalación. En SERTEC, ofrecemos soluciones avanzadas como el CMCE, que destacan por su innovación y efectividad. Contáctanos para garantizar la seguridad de tus instalaciones con la tecnología más avanzada del mercado.